lunes, 12 de febrero de 2018






 Tres....





Tres niñas miran al mar.

Cogidas de la mano ríen  felices

sin saber lo que les depara el futuro,

y su risa

se pierde entre el rumor de las olas...





La tercera de tres

se convierte en la segunda de dos....


    Esa era yo, la tercera hija de tres. La más pequeña. Cuando llegué al mundo ellas ya estaban. Nunca he estado sola, aunque sí me encontrado en ese estado, a veces. Cuando yo vivía una experiencia como nueva, ellas ya la habían vivido.... no todas, ya lo se....

    Mi madre, nos tuvo de cinco años en cinco. No tenía prisa, quería hacer las cosas bien.....
Es de este modo que mis recuerdos de la infancia son recuerdos compartidos. Cuando miro atrás,
muy atrás, siento añoranza, de la niña que fui.

    Las excursiones a la playa son uno de mis recuerdos favoritos, entre otros....

    Excursiones de un día, en autocar. Nos levantábamos muy temprano pero merecía la pena. Era nuestro día, y lo emprendíamos con la seguridad de que así sería.

    La excitación del viaje nos lo hacia breve. Cuando llegábamos íbamos directas al agua. A la fría agua del océano atlántico. Yo, que siempre tenía frio me ponía a tiritar y mi querida hermana , mi madrina, me cogía en brazos. Luego se iba a tomar el sol, ese sol que sólo brilla con tanta intensidad en nuestra tierra.... Mi padre se quedaba con mi Rosa y yo todo el tiempo. Mientras, mi madre se quedaba a la sombra en el Chiringuito "guardando el sitio". Vestida de calle, nos esperaba para secarnos y darnos de comer y beber...... Al caer la tarde regresábamos a casa.
Con la piel enrojecida y gran cansancio nos entregábamos al viaje de vuelta. Yo casi siempre, dormida....

Nos daba igual no tener coche. Nos daba igual que solo fuese un día. No necesitábamos más. No lo teníamos y no lo pedíamos. Aceptábamos sin más y con eso nos bastaba.


     Añoro el mar,
     Añoro esos momentos vividos en la playa,
     Añoro jugar en la arena con mis hermanas,
     Añoro pasear las tres juntas, después de comer....


    Añoro tener a mi familia unida y pegada junto a mi...

    Por más que me gustaría, no puedo retroceder en el tiempo,,

    Los recuerdos vividos se convierten así, en mis tesoros más preciados. Los conservo unidos a mi pecho, pegados al alma. Recuerdos felices que me entristecen al rememorarlos.........


Tres niñas pasean de la mano, 
miran al mar, 
y en su inocencia
se dejan llevar
por el envolvente baile
de las olas...


3 comentarios:

  1. Es hermoso y triste al mismo tiempo...

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  2. Yo añoro esas personas que eramos, alegres, despreocupadas. Entonces cuando nos reíamos y hacíamos castillos en la playa ni imaginábamos que nos separarían de forma tan brusca y dolorosa. Daba por echo que envejeceríamos juntas.Que nunca nos separaríamos.
    Espero que algún día podamos recordar todos los momentos que pasamos las tres juntas sin que se nos llene los ojos de lagrimas y nos duela tanto el corazón.

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